A partir del 1 de enero de 2022 Esther Barreiro, neumóloga del Hospital del Mar de Barcelona e investigadora en el Institut Hospital del Mar d’Investigacions Mèdiques (IMIM), será la nueva editora jefe de la publicación 'ERJ Open Research', tras un arduo proceso de selección de candidatos. El comité encargado de ello, que finalmente tomó la decisión por unanimidad, ha destacado la solidez de su candidatura así como "su visión y estrategia propuesta para la publicación".
Esther Barreiro en el claustro del Colegio de Fonseca en la inauguración del I Encontro Mundial de Médicos Galegos que organizó Asomega
Durante la última década Esther Barreiro ha compaginado una intensa labor investigadora con la dirección de la revista de la Separ, 'Archivos de Bronconeumología', a la que dejó situada con un factor de impacto de cinco. Además, en la misma sociedad puso en marcha 'Open Respiratory Archives' una publicación científica internacional, online, de acceso abierto, revisión por pares y bilingüe español-inglés.
Una experiencia tan sólida en este ámbito no ha pasado desapercibida para la European Respiratory Society(ERS), que aprovechará su magnífico bagaje encargándole la dirección de 'ERJ Open Research' durante tres años. La toma de posesión será el 1 de enero y hasta entonces se irá produciendo una transición gradual desde el comité saliente al nuevo equipo editorial.
Publicaciones de referencia
ERS cuenta en la actualidad con cuatro revistas: 'European Respiratory Journal', 'ERJ Open Research', 'European Respiratory Review' ('ERR') y 'Breathe'. Las dos primeras publican principalmente investigación original, mientras que ERR reproduce artículos de revisión a largo y corto formulario. Por su parte, 'Breathe' es la publicación educativa centrada en la práctica de ERS.
'European Respiratory Journal' (ERJ) es la revista oficial de la sociedad. Publica originales con trabajos clínicos y experimentales relacionados con todos los campos de la medicina respiratoria, incluida la biología celular, la epidemiología, la inmunología, la fisiopatología, las imágenes torácicas, la neumología pediátrica, la medicina ocupacional, los cuidados intensivos, la medicina para el sueño, la cirugía torácica y la oncología torácica. A eso le añade editoriales, revisiones, series de artículos, correspondencia y cartas al editor.
'ERJ Open Research', según su propia definición, es una revista de investigación original de acceso totalmente abierto. Publica trabajos de alta calidad en todos los campos de la ciencia y la medicina respiratorias, que cubren la ciencia básica, la ciencia clínica traslacional y la medicina clínica.
Casi medio centenar de sociedades científicas y asociaciones, entre ellas Asomega, han participado en la Guía Clínica para la Atención al paciente Covid persistente, un trabajo coordinado por la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG). Julio Ancochea, presidente de Asomega, es el representante de la entidad en el Comité Científico.
Portada de la guía. Pinche sobre la imagen para acceder al listado de miembros del Comité Científico
Pilar Rodríguez Ledo, vicepresidenta de la SEMG y coordinadora del trabajo junto con Lorenzo Armenteros, explicó recientemente, en la entrevista a Asomega con motivo de su designación como ganadora del XXII Premio Nóvoa Santos, que la guía pretende mejorar la atención a los pacientes y dotar de herramientas al profesional "que le ayuden a una toma de decisiones lo más adaptada al nivel de evidencia disponible y además lo más homogénea posible".
Su objetivo fundamental es conseguir que no se trate a estos pacientes "por cada uno de sus 200 síntomas, sino como una globalidad. Porque si no, correremos el riesgo de que los pacientes pasen por cada uno de los “ólogos”: el neurólogo por la cefalea, el cardiólogo por el síncope, el digestivo por la diarrea… Se van haciendo pruebas y pruebas cuyo objetivo global no está muy claro".
La guía ha sido remitida en primera instancia a la ministra de Sanidad, Carolina Darias, a las consejerías autonómicas de salud, así como al Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos de España (OMC) y otros colegios profesionales. También se ha enviado el documento al Departamento de Salud Pública de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para que tenga conocimiento de este trabajo colaborativo realizado en España.
Un documento vivo
"Queremos que facilite la toma de decisiones. Lamentablemente hay muy poca evidencia científica por el momento pero por eso lanzamos una guía dinámica que se irá actualizando", ha explicado en la presentación Pilar Rodríguez Ledo.
El documento colaborativo aborda la atención de los pacientes que padecen COVID
persistente o Long COVID, es decir, personas que presentan signos y síntomas que se desarrollan durante o después de una infección compatible con la COVID-19, que se mantienen durante más de 4-12 semanas y que no se explican por un diagnóstico alternativo.
La parte de la guía dedicada a la descripción de la afectación incluye las definiciones, hipótesis, etiopatogenia y caracterización clínica. Sus autores también hacen una serie de recomendaciones en relación a las pruebas de laboratorio, pruebas de imagen y complementarias, valoración de comorbilidades y situación funcional y social de los afectados, resumido todo en un kit de atención básica.
En lo que respecta al abordaje terapéutico del COVID persistente, enumera las posibles dianas terapéuticas y evidencias científicas, los tratamientos específicos o sistémicos, los tratamientos destinados a restablecer el equilibrio, tratamientos locales o sintomáticos, así como la vacunación frente al coronavirus.
En la parte de seguimiento de los afectados, el documento incluye una serie de recomendaciones al paciente, los programas de seguimiento en Atención Primaria, los criterios de asistencia compartida y apuesta por el trabajo multidisciplinar e interconsulta desde el primer nivel asistencial. El contenido de la Guía concluye con un apartado dedicado a los retos del futuro en torno a la atención de estos pacientes.
César de la Fuente presenta un curriculum de vértigo y una sucesión de logros apabullante. Pero su mérito mayor no radica ni en lo académico ni en lo profesional sino en el hecho de combinar esa indiscutible excelencia con una sencillez que lo hace cercano y accesible. Así lo demuestra su presencia habitual en medios españoles, a los que atiende con facilidad, y sus respuestas directas y sinceras. Como cuando apela a la pasión del investigador, reclama apoyo decidido a la innovación o expresa su deseo de volver por fin este año a Galicia.
César de la Fuente
Estudió en el Instituto Eusebio da Guarda de A Coruña, su ciudad natal. Luego, en León, hizo Biotecnología, cruzó el charco para ampliar estudios en la University of British Columbia de Vancouver (Canadá) donde se doctoró y de ahí pasó al Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT). Actualmente es profesor catedrático de Bioingeniería y Microbiología en la Universidad de Pensilvania donde, desde 2019, es investigador principal del laboratorio De la Fuente.
De forma muy resumida, el campo de César de la Fuente es la informatización de sistemas biológicos para el desarrollo de tecnologías que resuelvan desafíos como la detección del coronavirus o la resistencia a antibióticos.
De forma resumida, ¿cómo ha sido su trayectoria hasta llegar a su actual laboratorio?
Formé parte de la primera promoción de Biotecnología de la Universidad de León. Después realicé mi doctorado en la University of British Columbia en Vancouver, Canadá. Tras este periodo, me reclutó el MIT, dónde estuve unos años antes de venir a la University of Pennsylvania (UPenn). En cada paso tuve la suerte de aprender diferentes disciplinas, desde la microbiología y la inmunología, a la biología sintética.
Para cualquier investigador en España suena casi "marciano" que tenga un laboratorio propio en la Universidad de Pensilvania. ¿Por qué parece tan difícil apoyar el talento aquí?
He tenido mucha suerte la verdad y me considero un privilegiado por ser profesor en una de las mejores universidades del mundo. No creo que sea difícil en sí apoyar el talento. Pero creo que hace falta hacer una inversión en ciencia de verdad y a largo plazo. Esto ayudará a retener y atraer al talento.
¿Qué tendría que aprender la universidad española, qué esquemas podrían ser reproducibles aquí de lo que está viviendo en EEUU?
Inversión y creer en la investigación y desarrollo. También será importante erradicar la endogamia para poder construir un ecosistema de innovación basado en la meritocracia. Cosas más tangibles incluirían proporcionar oficina de patentes en las universidades para poder proteger la propiedad intelectual de los descubrimientos que se hacen en la universidad española. Eso a la larga puede traer beneficios a nivel económico que ayuden a perpetuar un sistema de innovación.
¿Se ve volviendo a España algún día? ¿Y a Galicia?
Nunca se sabe. Ahora mismo estoy muy contento donde estoy. Tengo la suerte de trabajar con gente excepcional y eso no lo cambio por nada. Pero está claro que echo de menos España y Galicia.
¿Cuándo fue su última visita a Galicia? ¿Tiene planificado algún viaje para acá?
¡Hace demasiado tiempo ya! Tengo muchas ganas de regresar para poder ver a mi familia y amigos. Espero poder ir este año.
Ha habido muchas noticias sobre su test rápido para detectar la Covid-19. ¿Cuándo cree que estará disponible comercialmente, qué plazos barajan?
Estamos trabajando con la FDA y desarrollando nuevos prototipos. Esperemos que lo antes posible pero los plazos son muy difíciles de predecir ya que no dependemos solo de nosotros.
La extensión y facilidad de acceso a medios diagnósticos como este que proponen, ¿puede ser tan crucial en la lucha contra la pandemia como las propias vacunas?
Constituyen una herramienta más. Pero son fundamentales. Si hacemos testeo de alta frecuencia se pueden prevenir muchos brotes, hospitalizaciones y muertes. Creo que los test de diagnóstico serán fundamentales en un futuro para prevenir la propagación no solo de COVID-19, también del virus de la gripe, enfermedades de transmisión sexual, superbacterias, etc. Igual que hoy salimos de casa con un paraguas cuando la predicción del tiempo nos dice que va a llover, en un futuro emplearemos las herramientas que tenemos disponibles (mascarillas, tests, etc.) para prevenir la transmisión de las enfermedades infecciosas, particularmente en los períodos de pico de propagación.
Su especialización principal antes del coronavirus se centraba en la resistencia bacteriana a medicamentos. ¿Siguen en esa línea o la pandemia ha trastocado su planificación?
Seguimos trabajando para poder desarrollar computacionalmente nuevos antibióticos. Es un tema muy serio ya que la predicción actual es que, debido a esta pandemia silenciosa, van a morir 10 millones de personas al año en el 2050 si no desarrollamos nuevos antibióticos. Nos estamos acercando peligrosamente a una era post-antibiótica.
El citado test rápido para la Covid-19 ha sido muy mediático. ¿Tienen en previsión algún otro desarrollo que vaya a despertar tanto interés?
Estamos trabajando en varias tecnologías. Un test colorimétrico para detectar COVID-19 similar a un test de embarazo y antibióticos diseñados por ordenador, entre otras cosas.
Por último: un consejo clave de César de la Fuente para un futuro investigador.
Para mi es fundamental tener pasión por lo que se hace. Si encuentras tu pasión, no necesitarás trabajar un solo día en tu vida.
La dolorosa noticia del fallecimiento de José Carro Otero llegó el pasado 23 de abril y quienes lo conocieron y trataron aún no la han terminado de asimilar. En Asomega el impacto ha sido intenso, y dos insignes representantes de la entidad lo han reflejado de manera emocionante y muy sentida a través de escritos difundidos en prensa.
Se trata del presidente de honor, Aniceto Charro Salgado, y de Miguel Carrero, presidente de Previsión Sanitaria Nacional. A ambos les unía una larguísima y honda amistad con el profesor Carro, y ambos lo relacionan con la histórica escuela médica compostelana "A fonte limpa", que fue objeto de intenso estudio por su parte y cuyos valores de conocimiento y humanismo encajaban como un guante con su personalidad.
Hoy es un día muy triste para Asomega. Ha fallecido el Profesor José Carro Otero, Presidente de la Academia de Medicina de Galicia y gran amigo de Asomega.
Conocí a Pepe Carro hace ya más de 60 años en Santiago, donde ambos nacimos y estudiamos en su Facultad de Medicina, compartiendo a un gran maestro, Ángel Jorge Etcheverry, catedrático de Anatomía y que fue Decano y Rector de su Universidad.
Siempre recordaré nuestros paseos por el parque de la Herradura, donde no era difícil encontrarse a las sonrientes Marías.
Ya en aquella época, Pepe era realmente una enciclopedia y un ilustrado; fuera el que fuera el tema que comentábamos, sus conocimientos eran realmente soberbios. Allí nació una profunda amistad que ha durado hasta el último día. Además, siendo yo alumno interno de anatomía, siempre encontraba en él, también interno de anatomía, todo el apoyo para que mis disecciones anatómicas mejorasen, pues él tenía una envidiable técnica anatómica, bastante mejor que la mía y una predisposición a la enseñanza práctica con los estudiantes de Medicina.
Nuestras vidas se separaron durante mucho tiempo, países y especialidades distintas, periodo en el que José Carro logró un reconocimiento universal, especialmente Portugal e Iberoamérica, por sus conocimientos históricos sobre el Año Santo y catedral compostelana, de Galicia y su historia, y de la medicina gallega en particular, antropología y arqueología, asociado a una singular bonhomía que le hizo recibir multitud de premios y distinciones y ser asesor de importantes figuras políticas.
Volvimos a coincidir en Madrid hace ya casi 30 años, siendo yo entonces Presidente de Asomega y nuestra vieja amistad volvió a cristalizar.
Desde entonces su cariño, reconocimiento y total apoyo a Asomega, en la cual creía firmemente, ha sido permanente y total. Su apoyo sirvió para que varios miembros de Asomega se incorporasen a la Academia: Aniceto Charro, F. García Fernández, F. Ruza, Miguel Carrero, siendo muchos de nosotros invitados a dar conferencias en la Academia.
De una forma recíproca, José Carro fue invitado a dar conferencias en la Casa de Galicia de Madrid, en cursos y simposios de Asomega y hace algunos años el Premio Novoa Santos de Asomega fue concedido a la Academia de Medicina de Galicia, por su emblemática labor por el desarrollo y reconocimiento de la medicina gallega y que él tan sabiamente supo dirigir y ya ahora en su segundo mandato; últimamente fue elegido para pronunciar la Conferencia Inaugural del Primer Encontro Mundial de Médicos Galegos celebrado en Santiago de Compostela en septiembre de 2019 “Aportaciones singulares desde Europa a la Medicina de Galicia en el decurso de los siglos”, que como siempre, nos emocionó a todos por su profundidad y conocimiento de la medicina gallega y su especial cariño a sus profesionales a lo largo de la historia.
Decía el Profesor José Carro en su conferencia: “Quienes se forman en la Facultad de Medicina de Santiago son buenas personas, eficaces en el diagnóstico y tratamiento, y tratan a tenor de ese diagnóstico, es decir, correctamente. La cosa funciona por tanto, pero podemos añadir algo más: la sombra de la ciudad, la medicina que se ha hecho y se hace aquí vive a la sombra de un santuario. Y eso es más cierto porque el Hospital Real, que funciona entre 1500 y 1954, está a la sombra de la Catedral”.
En estos últimos días y con motivo de la creación del Premio al “Humanismo médico” por Previsión Sanitaria Nacional y su Presidente Miguel Carrero, y en colaboración con Asomega y su Presidente Julio Ancochea, y en el cual yo también formo parte de su organización y difusión, decidimos contar con el Profesor Carro, para que nos ayudase y también valorase lo que la medicina gallega, y en el aspecto más humanista, viene haciendo desde el siglo XV, el inicio del Camino de Santiago y la creación del Hospital Real, planeando escribir y divulgar diversos artículos sobre todo ello, y también sobre la admirable generación médica de Santiago de Compostela, de comienzos del Siglo XX, que fueron reconocidos como a “FONTE LIMPA” por su especial calidad profesional asociada siempre a un singular humanismo y atención al paciente.
Precisamente este premio llevará el nombre de “FONTE LIMPA”, en recuerdo de toda aquella única generación de médicos humanistas y que todavía pervive en el espíritu de la medicina compostelana y gallega, y donde Asomega pretende reflejarse con la especial dedicación de Miguel Carrero y Julio Ancochea.
Con gran pesar, nuestro sueño ya no podrá contar con José Carro. Intentaremos desarrollarlo sin él, pero en nuestros corazones permanecerá siempre su imagen y el recuerdo de un gallego ejemplar, reconocido en todo el mundo, como maestro y médico de excelencia, digno de pertenecer a FONTE LIMPA, amigo eterno de Asomega, y a quien nunca olvidaremos.
ANICETO CHARRO SALGADO
PRESIDENTE DE HONOR DE ASOMEGA
D. Jose, como coloquialmente iniciaba o despedía uno de nuestros frecuentes encuentros, te has ido, simplemente te has marchado con naturalidad como una continuidad más de un quehacer habitual, como un hasta luego. Así es, hasta pronto Pepe.
En la inmensa suerte que me ha acompañado en la vida, conocer y disfrutar de Jose Carro, es y ha sido todo un emotivo, imborrable y singular privilegio. Eterno, cariñoso y fiel amigo, maestro en humanismo y humanidad, generosidad personificada, solidario en el saber y el hacer, entusiasta sin limites en todas las facetas de la vida, vida que vivió y trasmitió con alegría y sana intensidad.
Como compostelano y contemporáneo fue lo más natural conocer a Pepito Carro, compartir juegos, aventuras, inquietudes y las habituales e inocentes trastadas en la década de los 50 del 1900. Compartir aulas en Peleteiro, en la Facultad de Medicina. Compartir una profunda y sincera amistad, actividades profesionales de múltiples facetas, sueños, proyectos y diversos anhelos o, simplemente, un rato de charla, fue una gratificante y permanente constante.
Pepe paso de Pepito a D. Jose siendo siempre el mismo. Pepito, Pepe, no sé si alguna vez fue Jose o si ya paso a ser D. Jose y, por supuesto, Doctor, Profesor, Ilustrísimo y Excelentísimo. Cubrió todas las etapas de la vida con intensidad a la vez que con solemnidad como a él le gustaba hacerlo todo. Siempre referencia y con natural liderazgo como recordaba Xose Luis Bernal al frente del ejercito del Toral. Pepito mostraba ya lo que serían sus más fuertes pasiones, La Historia, nadie como él contando “historias”, posiblemente inducido de las fuentes de la ciencia y de la biblioteca de su tío el Canónigo e Historiador D. Jesus Carro, y la Anatomía, esta última era la razón de aquellas escapadas a cazar ranas o “arneirones”, (grandes lagartos), a lazo en el Bosque de La Condesa, con los que practicábamos los inicios de la técnica de disección emulando a Herófilo y a Galeno. Anatomía humana Antropología Anatómica, Historia de la Medicina, Historia de Compostela, de las Peregrinaciones, de La Catedral, Historia del Arte …, Ciencias a las que dedico con pasión toda su vida, siempre con la fuerza y la ilusión de un comienzo. Siempre disponible, emprendedor, colaborador, participante, maestro, entregado, generoso, desconocía el vocablo no. Momentos especiales hemos compartido en la Fundación Ad Qualitatem, en Previsión Sanitaria, en ASOMEGA, en la Real Academia de Medicina y Cirugía de Galicia… Te necesitábamos en el Premio “A fonte Limpa” de ASOMEGA en recuerdo de La Escuela Medica Compostelana que tu tanto has estudiado y difundido. Hace apenas 15 días me enviabas tu articulo sobre el Coco y la Coca bailando en el Altar Mayor ante el Apóstol, publicado en nuestro querido Correo Gallego.
Su aportación a las ciencias y a las artes, no se quedó solo en eso. Dio impulso y vida a todo aquello que hizo y emprendió, dio vida al pasado, a nuestro tiempo y nos hizo participes del conocimiento y del amor por nuestro mundo de ayer y de hoy. Toda su actividad fue una constatación de la sentencia de Cicerón: Conocer el pasado, para entender el presente y preparar el futuro. “La historia es el testigo de los tiempos, la luz de la verdad, la vida de la memoria, la maestra de la vida, …”.
Gracias Pepe.
MIGUEL CARRERO
PRESIDENTE DE PREVISIÓN SANITARIA NACIONAL Y SOCIO DE ASOMEGA
"Hay que innovar para mejorar". "Cualquier cosa que nos mueva la silla es bienvenida". "Del movimiento es de donde surgen las cosas y a mí me gusta el bullir de ideas, el sumar esfuerzos"... Una charla con Pilar Rodríguez Ledo se acaba convirtiendo en una copiosa recolección de frases llenas de fuerza y sentido común, formuladas con tanta sencillez como contundencia.
La flamante ganadora del Premio Nóvoa Santos que concede Asomega -con la colaboración de Roche- describe en esta entrevista su singular trayectoria, que por variada e insólita la convierte en testigo excepcional de la evolución del sistema de salud, de las dificultades que enfrentan unos profesionales ya exhaustos antes de la pandemia y de las necesidades de una sociedad que, siempre, confía en sus sanitarios.
¿Cuáles han sido sus primeras impresiones tras ser nombrada ganadora del Nóvoa Santos? Lo cierto es que las reacciones tras conocerse la decisión de la Junta Directiva de Asomega han sido unánimemente positivas… La verdad es que no puedo decir otra cosa: me siento doblemente honrada, por el reconocimiento y por los apoyos y las palabras de la gente que, a su vez, son mayor premio. Cuando encima es en tu casa, en tu zona, en tu lugar de trabajo donde te felicitan, puntúa doble. Me siento tremendamente honrada desde la humildad de mi posición porque me considero una eterna aprendiz de todo y también por el hecho de que se otorgue a la Atención Primaria. Honradísima y agradecidísima a los compañeros.
Como sabe, es el primer año en que parte de la cuantía del premio se repartirá en un proyecto de investigación y una iniciativa de humanización elegidos por usted. ¿Los tiene ya seleccionados? Todavía no, pero debo decir que me parece una decisión muy afortunada. Todos los premios deben ayudar a hacer escuela, a conseguir un propósito global más allá de la propia persona y a aportar algo de retorno. Tengo varias ideas, pero aún debo valorarlas bien. Además trabajo en humanización, así que como decía aquel tengo "el corazón partío" y no sé por cuál me decantaré. Pero me parece esencial que todo premio tenga un retorno a la sociedad en la que vivimos. Además, en el ámbito sanitario resulta imprescindible que los profesionales seamos también humanistas.
Nació y estudió en Barcelona pero luego ha desarrollado toda su carrera en Galicia. Cuéntenos brevemente su trayectoria. Soy hija de gallegos de Lugo que emigraron nada más casarse y yo nací circunstancialmente en Barcelona, donde viví y estudié en el Clinic. Tengo gratísimos recuerdos de toda esa época y grandes amigos de entonces, pero sabía que quería venirme a Galicia, al igual que mis padres. Soy hija única y en un momento dado nos vinimos para acá. Nunca me he arrepentido. No porque no estuviera bien en Barcelona, en absoluto, sino porque creo que es otra manera de vivir y de entender la profesión. Debo muchísimo a Barcelona, pero donde me he formado de verdad es aquí en el mundo rural, es lo que profesionalmente más me ha aportado.
¿Qué lecciones principales extrae de su experiencia como médico rural? La Medicina de Familia se caracteriza por su versatilidad, que nos lleva a ver la profesión desde distintos puntos de vista. Me considero muy afortunada porque empecé quizás con la parte más dura, la medicina rural, aunque también resulta muy enriquecedora. El sentimiento de soledad profesional resulta a veces difícil de llevar, así como el peso de la responsabilidad de tus pacientes. Confían plenamente en ti, están lejos del hospital, continuamente contigo y con lo que tú les puedes recomendar y eso supone una sobrecarga importante. No digo que otros profesionales no tengan también esa responsabilidad, pero aquí se vive de una manera muy diferente.
Aunque ahora estoy en labores de gestión, mis pacientes de cuando estaba en el rural me siguen viniendo a ver, lo cual me hace muchísima ilusión, o cuando están ingresados me llaman y los voy a ver. A pesar de la dureza de este mundo, guardo muchos recuerdos y creo que el aprendizaje profesional y humano que tuve allí fue importante. Cuando trabajas en el mundo rural nunca te separas de tus pacientes.
Trabajé 17 años en la zona de Caurel, y sigo muy vinculada con la gente de allí. Aprendí a implicarme como médico y como habitante, ya que residí allí fijo once años y montamos la primera asociación de mujeres rurales, participamos en la fiesta de la castaña y en todo acto social que hubiera... Es imposible desvincularte en una zona rural.
¿Cómo vivió el paso a la Atención Primaria urbana? De ahí pasé a un centro de salud de Lugo, que desde luego sigue siendo mi centro de salud y mi plaza está ahí. También mis pacientes me vienen a ver a veces al hospital, aunque ya llevo tiempo fuera. Guardo muy grato recuerdo porque ha sido otra manera diferente de ver la medicina, otra manera de relacionarse con los pacientes y con la población. Aprendí a pasar de estar profesionalmente en el equipo médico-enfermera a estar en un equipo con muchos médicos, muchas enfermeras y en coordinación con otros especialistas de hospitales.
¿Y cómo fue el salto a la docencia? Soy tutora de residentes de Medicina de Familia, que es una de las cosas con las que más disfruto. Llevo más de once años siendo la jefa de estudios de Medicina Familiar y Comunitaria. Me parece que es una forma muy bonita de verter lo que uno va aprendiendo profesionalmente en las nuevas generaciones, de dejar en el recuerdo y transmitir el día a día de lo que vas aprendiendo. Es algo que me mantiene viva e ilusionada.
El último escalón, de momento, es la gestión. Pero antes ya había sido técnico de salud porque la investigación era algo que me gustaba. De hecho, hace muchísimos años unos compañeros y yo hicimos la primera fundación de investigación y de formación que se constituyó en Galicia por profesionales, poniendo dinero de nuestros bolsillos y disfrutando mucho. Contactamos con muchos profesionales y muchos grupos de compañeros, con los que hicimos actividades, debates y proyectos de investigación. Uno de ellos fue, precisamente, el anterior Premio Nóvoa Santos, José Ramón González Juanatey, que me ha felicitado por el galardón, y al que además recuerdo especialmente porque con él hice mi primera intervención en público en un congreso. Eso también me abrió puertas para ver la Medicina de una manera diferente.
Ahora, desde hace unos cuatro años, soy responsable de innovación en la estructura de los nodos de innovación que hay en Galicia. Me parece que no se puede estar en un sistema sanitario sin intentar innovar en estructura, en funcionamiento, en recursos y método de trabajo. Y finalmente también he tenido experiencia en calidad y humanización. Todo esto me da un prisma del sistema sanitario bastante amplio y me ha brindado la oportunidad de aprender de los mejores. Creo que toda esta trayectoria lo que me hace es ver la profesión desde todos sus ámbitos.
¿Volverá a la asistencia o encuentra tanta satisfacción en estas otras áreas en las que está ahora, que no se lo plantea? Realmente no lo sé. Echo de menos la asistencia, pero lo que hago también me gusta mucho. Lo que sí sé es que, esté es un sitio o en otro, voy a seguir intentando hacer lo mismo: desde la gestión sigo en contacto con pacientes míos y si estuviera en el mundo asistencial, intentaría seguir con proyectos de formación, de innovación, de investigación. Me gusta todo. Creo que tenemos una profesión tan bonita, con tantas vertientes diferentes que no podría decirte una que no me gusta. Y desde luego no estoy en la gestión porque no me guste la asistencia.
Galicia ha hecho una apuesta clara por la telemedicina y la hospitalización a domicilio como estrategias ante el envejecimiento de la población y la dispersión geográfica. ¿Es puntera en estos aspectos? Galicia es puntera en la aplicación de la tecnología a la asistencia. Falta mucho por hacer, pero sin duda es de las comunidades más punteras en este campo, como lo demuestra el tener una historia clínica electrónica compartida entre todos los entornos: primaria y hospitalaria, pero también los centros sociosanitarios.
Creo que esta pandemia que vivimos nos ha revolucionado con las tecnologías y ha puesto más de manifiesto que los profesionales tenemos que seguir al paciente, no los pacientes a los profesionales. Y sus datos y su información tiene que estar al servicio de la mejor atención posible. Hay muchos proyectos en el Sergas para mejorar eso y tenemos que ir por ahí. Sin duda de todo lo que yo conozco el Sergas es puntero en relación al resto de las comunidades autónomas. Eso no quiere decir que no tengamos que ser mejores aún y que hacer reformas para tener proyectos donde la historia realmente sea del paciente, pero me parece que vamos por el buen camino.
Formación, docencia, investigación ¿por qué parecen tan alejados de la práctica de los médicos de AP? Creo que son lejanos para todos los ámbitos. La asistencia ocupa una parte tan enorme de la vida profesional que queda muy poquito para la docencia, la investigación y la innovación. Al final hay que recurrir a los horarios personales para desarrollar esas facetas y eso no debería ser así. Entre otras cosas porque dan valor a la asistencia, dan seguridad a los pacientes y hacen que la atención sea de más calidad. Además, nos ayudan a mejorar profesionalmente. Son las asignaturas pendientes de nuestro sistema sanitario.
¿Pero afecta en mayor medida a la Primaria? Aquí llueve sobre mojado porque hay mucho que hacer. Pero me gustaría transmitir una idea: no creo que la Atención Primaria esté en declive o en crisis. Lo que tenemos es un sistema sanitario que está agotado en el modelo actual y su eslabón más débil es la Atención Primaria. Nadie piense que tiene solución con un nuevo modelo. Llevo 25 años debatiendo sobre la reforma de Atención Primaria y estoy un poco harta del debate. No porque no considere que haya que hacerlo, sino porque hablar de lo mismo tanto tiempo es muy aburrido y desanima a cualquiera.
La gente está desmotivada porque no ve salida a todo esto. Tenemos que reformar el sistema y hacerlo acorde a las necesidades actuales y a los mundos en los que vivimos. Insisto, es el eslabón más débil porque se invierten menos recursos, porque está más aislado, porque es más difícil organizarlo de una forma eficiente. La accesibilidad es máxima y claro, no cabe todo: si tienes accesibilidad máxima y sin barreras no puedes tener tiempo para otras cosas.
Las administraciones deberían darse cuenta de que cuando invierten en docencia, investigación e innovación están invirtiendo en asistencia, están mejorando el modelo y nos están mejorando a los profesionales. Claro, esta mejoría no se ve al año, a los dos años, solo se ve a largo plazo. Pero al final o las cosas se hacen o esto se cae, y habrá que hacerlo. Mis compañeros de Atención Primaria poco pueden hacer más allá de lo que hacen y sí que requiere un cambio urgente.
La pandemia ha demostrado la debilidad del eslabón que es la AP, pero al mismo tiempo la ha reivindicado socialmente. Si fuéramos capaces de aprender de esta pandemia sacaríamos muchas lecciones. Desde la humildad deberíamos interiorizar todo aquello que se pueda aprender y creo que una de las cosas que se ha visto es que la Atención Primaria estaba al límite pero aún así ha aguantado. A veces se ha actuado de espaldas a la Primaria y a veces se ha desestructurado el nivel para estructurar otros sistemas alternativos. Pero a pesar de todo, ha aguantado y eso tiene su mérito. Sí que es verdad que ahora todos los profesionales están exhaustos y desanimados y eso es algo por lo que hay que luchar porque la pérdida de la ilusión es lo único que no es posible combatir con casi nada.
En el MIR de este año es la especialidad con más peso: dos de cada diez plazas van a Medicina Familiar y Comunitaria. ¿Están cambiando las tornas? Eso no es lo que más me importa. Si he aprendido algo en estos once años es que lo importante no es tener un número maravilloso, sino tener una vocación verdadera. Tener un buen número y estar en una especialidad equivocada es un gran error, y el tener una vocación sólida es lo único que puede salvar esto.
Pero es importante tener más plazas… Esto no se puede arreglar solamente lanzando un número alto de plazas MIR porque ¿quiénes van a ser los tutores, esos que están agotados en el centro de salud? Porque otros no hay. ¿Con qué los vamos a incentivar, cómo? Todo tiene un límite, se estira el chicle pero al final se rompe. No podemos pensar que la solución es incrementar el número de residentes. Es importante, y en Lugo lo hacemos ofertando el número máximo de plazas posibles, pero para tener residentes hay que tener tutores. Además de ofertar plazas MIR hay que hacer más cosas y es poner la docencia encima de la mesa y darle el valor que tiene, porque un sistema sanitario sin docencia no es nada, no tiene futuro.
¿En qué situación ve la lucha contra la pandemia en Galicia? Creo que dentro de todo hemos tenido una gran suerte porque la afectación que hemos sufrido no es comparable a la de algunas otras autonomías. Eso nos ha dado tiempo para reorganizarnos estructural y organizativamente. Dentro de lo que es esta situación en la que tantas pérdidas ha habido de pacientes y de profesionales que se contagiaron en la primera línea, estamos en una situación bastante mejor que otras zonas y quizás la dispersión también nos ha favorecido. Tendremos que aprovechar todo esto para aprender y organizarnos. Al final esto ha sido una prueba de fuego. Hemos de tener un sistema sanitario lo suficientemente flexible y adaptativo para dar respuesta a todo eso.
Los avances que hay ahora en la vacunación, ¿implica un riesgo de relajación por parte de la ciudadanía? A la vez que con una mano vacunamos, con la otra tenemos que combatir ese exceso de confianza, por aquello de que los que se ahogan son los buenos nadadores, no vayamos a caer en ese error. Pero aun así también tenemos que darnos cuenta de que la población está cansada de medidas restrictivas y es difícil luchar contra todo eso. La vacunación es una parte muy importante y nos va a ayudar a estabilizarnos un poco. Pero el cuidado, la precaución, la distancia social, el lavado de manos, la mascarilla... todo esto va a seguir formando parte de nuestro entorno. Otra cosa que a veces, incluso por pudor, no decimos que los humanos somos seres de relación social, y además los gallegos somos tremendamente afectuosos. Creo que la falta de abrazos, de besos, de achuchones, también es algo que emocionalmente sufrimos. Tenemos que trabajar emocionalmente con la soledad que trae esta pandemia, con el aislamiento.
¿Qué porcentaje de pacientes que han sufrido COVID podrían estar padeciendo sintomatología de larga duración? Es como un gran iceberg en cuya base se encuentran estos pacientes que ni siquiera estuvieron muy graves en su fase aguda, pero que después siguen manteniendo meses y meses su sintomatología. No hay registros que avalen los números de afectados, pero las estimaciones nos dicen que son entre un 10-15 por ciento de los afectados. Si vamos por 3,5 millones de contagiados -y no contamos ahí a los asintomáticos- fácilmente podemos estar acercándonos a medio millón de personas en España que tienen entre uno o muchos síntomas persistentes. Son jóvenes, en etapas activas de la vida laboral y de la vida familiar y que se encuentran mal día tras día.
¿Hay un perfil definido de estos pacientes? Son personas jóvenes con una media de edad de cuarenta y pocos años. El cincuenta por ciento están entre 36 y 50 años. La mayoría son mujeres, hasta el 79-80 por ciento, y la mayoría no tienen otras comorbilidades, otras patologías previas.
Y dentro del amplio abanico de síntomas posibles, ¿qué es lo más habitual? Los síntomas más frecuentes en todas las encuestas son una astenia intensa, que muchas veces les impide levantarse de la cama y que la sufren el 95 por ciento de los afectados; además, la cefalea, los déficit de atención, los déficit de memoria, disnea, fatiga, tos, dispepsia, diarreas, síntomas digestivos... Pero sobre todo la astenia, el déficit de atención y el déficit de memoria son cuestiones que condicionan muchísimo, porque retornar a la vida laboral resulta muy difícil.
La SEMG y otras 27 sociedades científicas y colectivos de pacientes de toda España colaboran en un proyecto para la atención a los afectados por COVID persistente. Una de sus metas es la elaboración de una guía clínica consensuada. ¿Cuál es su finalidad? Homogeneizar la atención que prestamos a los afectados. Porque cuando estamos en situaciones como estas, donde la evidencia es poca, donde no sabemos cuál es la etiología sino que tenemos hipótesis y no hay tratamientos específicos, resulta muy difícil prestar una asistencia adecuada a las necesidades del paciente.
El principal objetivo de la guía es mejorar la atención a los pacientes y dotar de herramientas al profesional que le ayuden a una toma de decisiones lo más adaptada al nivel de evidencia disponible y además lo más homogénea posible. De modo que no tratemos a estos pacientes por cada uno de sus 200 síntomas, sino como una globalidad. Porque si no, correremos el riesgo de que los pacientes pasen por cada uno de los "ólogos": el neurólogo por la cefalea, el cardiólogo por el síncope, el digestivo por la diarrea... Se van haciendo pruebas y pruebas cuyo objetivo global no está muy claro.
Por otra parte, ellos mismos como colectivo manifiestan que se encuentran estigmatizados porque, desestimando toda la atención, se les dice que ya se les pasará, que están nerviosos, ansiosos o deprimidos. El blanco y el negro no son los colores más adecuados, sino que hay mil gamas de grises y lo que hay que buscar es darles esa mayor atención.
¿Cuándo verá la luz esta guía? La versión global con las aportaciones de todas las sociedades la estamos mandando en este mismo momento desde la Secretaría de la SEMG. Esperamos para la semana que viene empezar a presentarla, teniendo en cuenta que es un documento vivo y dinámico, porque la falta de evidencias suficientes hará que se tengan que reconsiderar las situaciones y deseamos que aparezcan más evidencias que nos permitan mejorar la atención. Pero por lo menos da un punto de partida de ayuda profesional y de mejora de la atención al paciente.
Obligatoriamente ha de ser un documento vivo, dada la falta de evidencia… Siempre digo que esto es bueno porque nos vuelve a acostumbrar a que el aprendizaje tiene que ser algo continuo en nuestra vida. Lo de hoy nunca es como lo de ayer ni va a ser como lo de mañana, hay que seguir aprendiendo eternamente.
Uno de los proyectos más ilusionantes de nuestra asociación es Asomega Muller. ¿Ha sentido como mujer mayores dificultades para alcanzar sus metas a lo largo de su carrera? Si dijera que no sería mentira pero si dijera que sí a lo mejor tampoco era del todo verdad. Estamos en un mundo donde hacer determinadas cosas es más difícil, sobre todo el rol de la mujer en la familia es diferencial al del hombre y conlleva unas connotaciones y unas decisiones determinadas. Cuando tienes que elegir entre las cosas la elección siempre es bastante clara hacia dónde se va. Sí que es verdad que en determinados niveles esta sociedad todavía no entiende bien lo que es la igualdad, que tiene que ser una igualdad de oportunidades.
Yo digo siempre en broma que no quiero ser igual a los hombres y no quiero tener el 50 por ciento, porque a lo mejor me merezco el 80. Reclamo por tanto igualdad de oportunidades y después sí que el resultado dependerá de a lo que llegues. Deberíamos favorecer que el ser humano, sea lo que sea, esté en igualdad de oportunidades da igual que sea hombre o mujer, es una persona y tiene que ser la más adecuada para los puestos y los trabajos que se realicen. No quiero discriminación positiva, pero tampoco la quiero negativa. Quiero que cuando me toque el 30 sea el 30 y cuando me toque el 80 por ciento sea el 80 por ciento, ¿por qué me tengo que quedar en el 50?
Asomega está inmersa en una fase de cambios y de proyectos ambiciosos e ilusionantes como Academia Asomega, el plan Impulso Vinteún, la creación de la red de aulas por el mundo…¿Cómo valora todas estas iniciativas? Hay que innovar para mejorar, lo peor es quedarnos estáticos, acomodarnos. Cualquier cosa que nos mueva la silla es bienvenida. Me parecen iniciativas todas muy alentadoras, que pretenden movernos la silla a todos. Del movimiento es de donde surgen las cosas y a mí me gusta el bullir de ideas, el sumar esfuerzos. Estoy plenamente convencida de que juntos sumamos y solos no somos nada. Pese a la dificultad que a veces tiene el ser humano en estos momentos que vivimos para asociarse y agruparse. Sí que estoy convencida de que cuando hay gente que pone el banderín en un camino, otros se suman cuando lo ven claro.
El presidente habló en la Junta Directiva del otro día de la próxima edición del Encontro Mundial de Médicos Galegos. ¿Qué balance hace del primero, en el que participó activamente y qué espera del que se celebrará con toda probabilidad en 2022? Aquella experiencia fue para mí muy sorprendente, primero porque es muy difícil conseguir que todos nosotros salgamos de nuestro entorno por un objetivo que podamos compartir con los demás. Establecer un punto de encuentro siempre es una magnífica idea. El pueblo gallego es emigrante, está muy disperso y eso en sí mismo ya enriquece porque los gallegos estamos siempre dispuestos a sumar esfuerzos y el Encontro lo puso de manifiesto.
Lo más difícil que consiguió el Encontro fue dar con un punto de encuentro donde el especialista más especializado era capaz de compartir el interés por lo suyo con el resto que solo conocemos de ese área lo más superficial. Fue para mí uno de los mayores éxitos de la cita. Ese debe ser el camino porque todos tenemos cosas en común y a todos nos enriquece saber qué está haciendo el otro.
El médico compostelano José Carro Otero, presidente de la Real Academia de Medicina y Cirugía de Galicia, ha fallecido a los 78 años, según confirmó con gran pesar su propio hijo Gonzalo ayer mismo a Julio Ancochea, presidente de Asomega.
José Carro pronunció la conferencia inaugural del I Encontro de Médicos Galegos que Asomega organizó en septiembre de 2019.
Médico, antropólogo y un auténtico erudito en otros campos como la arqueología o la historia del arte, Carro Otero nació en Santiago en julio de 1942, se doctoró en Medicina y Cirugía en la Universidad de su ciudad natal y se especializó en Anatomía Antropológica. Su labor docente la desarrolló como profesor de Anatomía Humana Descriptiva y Topográfica, de Antropología en la Facultad de Biología y de Biología Humana e Historia de la Medicina en la Universidad de Santiago.
El 11 de junio de 1993 ingresó en la Real Academia de Medicina y Cirugía de Galicia, donde ocupó la cátedra de Historia de la Medicina y en 2014 fue elegido presidente de esta institución.
Siempre cerca de Asomega
El repentino fallecimiento del doctor Carro ha causado consternación en toda la comunidad académica, médica y científica gallega. Su bonhomía, su magnífica disposición para compartir los enciclopédicos conocimientos que atesoraba y su brillantez a la hora de exponerlos hacían de él un hombre muy querido y enormemente respetado desde el punto de vista intelectual.
Con Asomega mantuvo siempre una relación muy cariñosa y cercana, fruto de la cual no dudó en colaborar con la entidad siempre que se requería su presencia. Tal fue el caso del homenaje a la figura del ilustre ourenseano Benito Jerónimo Feijóo, el Padre Feijóo, en el Pazo de Casdemiro.
Además, en esta entrada se encuentran los artículos en su memoria escritos por dos referentes de Asomega y grandes amigos del finado, el presidente de honor de la entidad Aniceto Charro y el presidente de Previsión Sanitaria Nacional, Miguel Carrero.
También participó activamente en el I Encontro Mundial de Médicos Galegos, donde se hizo cargo de la conferencia inaugural. Habló sobre "Aportaciones singulares, desde Europa, a la Medicina ejercida en Galicia en el decurso de los siglos". A ella se refirió en una entrevista que concedió a Asomega.
En la presentación de la conferencia, el decano de la Facultad de Medicina, Julián Álvarez Escudero, ya destacó su extensa preparación y su condición de docente, a pesar de estar ya jubilado. "El profesor Carro va a ser profesor universitario toda su vida", aseguró.
Puede verse la conferencia completa de José Carro en aquella cita tan singular aquí:
A continuación, el profesor Carro nos atendió para explicarnos el alcance, relevancia y aportación de la figura del doctor Nóvoa Santos, que da nombre al premio que entrega Asomega:
El profesor Carro empezó su conferencia con una aseveración que le definía bien como experto en historia, humanista convencido y fiel defensor de su alma mater:
"Quienes se forman en la Facultad de Medicina de Santiago son buenas personas, eficaces en el diagnóstico, y tratan a tenor de ese diagnóstico, es decir, correctamente. La cosa funciona, por tanto. Pero podemos añadir algo más: la sombra de la ciudad. La medicina que se ha hecho y se hace aquí vive a la sombra de un santuario. Y eso es más cierto porque el Hospital Real que funciona entre 1500 y 1954 está a la sombra de la catedral".
Las personas con discapacidad deben ser tenidas en cuenta en la nueva fase de vacunación. Esta ha sido una de las principales conclusiones de la jornada ‘El impacto de la Covid-19 en las personas con discapacidad’ organizada por Ilunioncon la colaboración de GSK.
En ella ha participado el presidente de Asomega, Julio Ancochea, en una intervención calificada de brillante por Sanifax, que añade que ha sido "probablemente una de las mejores que ha hecho en pandemia".
Ancochea: nosotros, trabajo en equipo, humanización
En su intervención, Julio Ancoechea ha afirmado que "la pandemia está poniendo en prueba a nuestra sociedad y a nosotros mismos. Es el reto más importante al que nos hemos enfrentado nunca y ha requerido respuestas inmediatas ante situaciones nuevas de gran complejidad".
La forma en que se ha dado respuesta a estos nuevos desafíos ha tenido, necesariamente, que vestirse de humanidad: "Fue emocionante el trabajo en equipo en mi hospital. Siempre digo a mis alumnos de Medicina que conjuguen la primera persona del plural. Aprovecho para decírselo también a los políticos".
Según Julio Ancochea, "nosotros somos mucho mejores que tú o que yo. Y reivindicamos los valores de la dimensión humana de la Medicina, valores que alcanzaron su máxima plenitud en las personas más vulnerables y que debe multiplicarse hasta el infinito en personas con discapacidad".
El presidente de Asomega asegura que la soledad ha sido dramática, "sobre todo para los mayores y discapacitados en nuestros hospitales, que estaban en esta situación tan límite". En tan dramáticas circunstancias reivindica Ancochea la importancia de acercarse al paciente, cogerle la mano, mirarle a los ojos: "El afecto, el amor, la amistad no eliminan la soledad pero pueden hacerla soportable. Podemos vivir la soledad fecundamente con los demás".
Begoña Taboada, miembro de Asomega Nova, ejerce en el Complejo Hospitario Universitario de Santiago, donde hizo la residencia. Después pasó por el gijonés Hospital de Jove y el de Vigo antes de volver al CHUS. Pontevedresa de Arcade, confiesa su orgullo de gallega y su entrega a una especialidad que descubrió casi de manera casual, pero que hoy por hoy le apasiona. De su etapa universitaria, una curiosidad recurrente en ya varias generaciones de estudiantes de Medicina de Santiago: el gran recuerdo que guarda de las clases del profesor Carracedo.
¿Dónde estudiaste Medicina? ¿Por qué tomaste esta decisión, tenías antecedentes familiares? Estudié aquí en Santiago de Compostela. No tengo ningún médico en la familia, pero desde pequeñita decía que quería ser médico, y a medida que crecía seguía con la misma idea. Fui bastante cabezona, porque tenía a mi madre tratando de que no lo hiciera.
¿Qué recuerdo guardas de la universidad? ¿De qué profesores mantienes una memoria más intensa y por qué? Es una época de cambios, para mi fue el inicio de vivir fuera de casa de mis padres, la independencia, también el agobio con los exámenes, pero en general es un momento de conocer y adaptarse a cosas nuevas. Guardo recuerdos de varios profesores, de Meaño con sus clases de Anatomía con sus dibujos perfectos, de Garabal en las clases de Farmacia y por supuesto de Carracedo, haciendo que en el último curso te inclinaras por la medicina legal.
Desde que acabaste la carrera, ¿por qué sitios has pasado que te han dejado una huella más honda? Realicé la residencia de Oncología Radioterápica también en Santiago, así que no tuve mucho cambio de lugar, pero al acabar la residencia pasé por Gijón y Vigo, y creo que trabajar en sitios distintos a los que te formaste hace que aprecies los distintos puntos de vista de cada uno y que te adaptes a las diferentes formas de trabajar. Creo que todos, en algún momento, deberíamos salir de nuestra zona de confort a nivel laboral para ampliar horizontes.
¿Qué te hizo decidirte por tu especialidad? Fue en las prácticas de Radiología. No sabía ni que la Oncología se dividía en Médica y Radioterápica, y el que fuéramos muchos alumnos en las prácticas de Rayos hizo que a mí me mandaran al Departamento de Radioterapia. Allí, en pocos días, descubrí esta maravillosa especialidad.
Oncología Radioterápica, una elección acertada
¿Te has arrepentido alguna vez de aquella elección? ¿Decidirías hoy lo mismo? Nunca me he arrepentido, volvería a escoger la misma especialidad sin dudarlo. Es una especialidad desconocida pero muy completa, y me alegro mucho de que fuéramos muchos en aquellos prácticas de Radiología y poder dedicarme a esta parte de la Oncología.
En estos tiempos de superespecialización, ¿cuál es tu área profesional principal? Nos dividimos por patologías, en mi caso me centro en carcinoma de pulmón y próstata.
¿Clínica o investigación? ¿Se puede ejercer la una sin la otra? Ambas. Creo que deberían ir de la mano, me parecen imprescindibles las dos para un buen desarrollo profesional.
¿Cómo ha avanzado tu especialidad desde que comenzaste a ejercer hasta hoy, qué es lo que más te llama la atención al respecto? La gran innovación en la Oncología Radioterápica es la tecnología, que nos ayuda a poder realizar tratamientos más seguros, con menos efectos secundarios y eficaces para los pacientes.
¿Algún consejo / advertencia / comentario para quien esté pensando dedicarse a lo mismo que tú? Como ya he dicho es una especialidad muy completa, en la que dispones de quirófano con la braquiterapia, consultas y posibilidades de realizar investigación. Creo que no se arrepentirían de escoger esta opción.
Covid-19: "Hemos salido reforzados"
¿Cómo has vivido desde tu posición la respuesta sanitaria a la pandemia? Han sido unos meses difíciles, en los que hemos tenido que adaptarnos a la situación, cambiando agendas, realizando teletrabajo, intentando disminuir todo lo posible las visitas de los pacientes al hospital, aprendiendo a convivir con distancias y mascarillas, pero creo que hemos salidos reforzados de esta terrible situación.
A nivel personal, ¿qué lecciones extraes de esta experiencia tan extrema? La importancia del compañerismo demostrado todos estos meses y la adaptación a una situación inimaginable, tanto a nivel profesional como familiar.
Y a nivel social, ¿crees que hemos aprendido algo? ¿Salimos mejores de esta situación, como se decía sobre todo al principio? Creo que la sociedad ha sabido adaptarse a las restricciones y los cambios tan duros impuestos estos meses, con personas más conscientes y formadas en la situación, cosa que me parece crucial para intentar disminuir los contagios y vencer esta pandemia.
¿Temes un rebrote virulento? De producirse, ¿crees que tenemos capacidad para responder, tanto los sanitarios como la sociedad en general? Como decía, creo que la sociedad está más preparada y los sanitarios también lo estamos. Confío que con las vacunas y la mayor concienciación de la sociedad se puedan ir disminuyendo los casos.
Orgullo de Galicia
Asomega Nova parecería que navega contra la corriente: busca la participación y la implicación colectiva de la gente más joven, teóricamente más reacia a involucrarse en este tipo de proyectos. ¿Qué le supone a un joven sanitario sumarse a esta iniciativa? Pues en mi caso unirse a Asomega supone estar comprometida con los nuevos proyectos de la asociación y poder aunar conocimientos con compañeros gallegos.
Una de las bases de ese sentimiento es la galleguidad. ¿Cómo la entiendes tú, crees que hay rasgos específicos que definen al gallego? Los gallegos somos gente especial y excepcional, trabajadores y acogedores. Creo que debemos estar orgullosos de todo lo que envuelve a Galicia: nuestra gente, cultura y lengua.
El segundo Congreso Nacional Multidisciplinar Covid-19 de las Sociedades Científicas de España ha concluido con once demandas consensuadas por las 82 entidades que han participado en el evento online.
La primera edición del congreso, que se celebró en septiembre, se cerró con la petición a los políticos de que guiaran sus actuaciones según la evidencia científica y actuaran de manera coordinada. Ahora insisten en la unidad de criterios a la hora de establecer pautas para luchar contra la pandemia y ponen el acento también en que se potencie la vacunación.
El manifiesto resultante del congreso con sus once peticiones se ha convertido en una petición pública de firmas a través de la plataforma Change.org a la que se puede sumar todo ciudadano.
Julián García Feijóo, miembro de la Junta Directiva de Asomega, ha sido uno de los integrantes del comité organizador en su calidad de secretario de la Sociedad Española de Oftalmología. Francisco García Río, vicepresidente de Asomega, también ha participado en actividades del congreso como presidente electo de Separ.
Investigación de la USC en el Congreso de Covid-19
Uno de los estudios presentados en el transcurso del congreso Covid-19 procedía de Galicia. Se trata de un proyecto de la Universidade de Santiago de Compostela en colaboración con la Cofradía de Pescadores de Miño. En él se han detectado indicios de presencia de material genético del virus de la Covid-19 en muestras de especies del ecosistema de la costa gallega.
“Los resultados sugieren un estado no infeccioso del virus y un alto grado de degradación de su ácido nucleico, lo que implica un riesgo prácticamente nulo de adquirir SARS-CoV-2 por el consumo de moluscos”, explica el profesor de la USC Jesús López Romalde.
SARS-Cov-2 en el medio marino
“Llevamos muchos años estudiando virus que se transmiten por vía fecal-oral, responsables de enfermedades como la gastroenteritis”, explica Romalde. “Cuando comenzó la pandemia, se descubrió que el SARS-CoV-2 se detectaba en las heces, por lo que el material genético del virus estaba presente en las aguas residuales. Los equipos con los que trabajamos en este campo rápidamente se pusieron en marcha para ver cómo podíamos ayudar a controlar la propagación de la pandemia a través del análisis del agua, con el fin de predecir brotes en la población”, continúa López Romalde.
Para investigar la posible presencia de SARS-CoV-2 en el medio marino, se analizaron 12 muestras de sedimentos y 12 muestras de almeja (Ruditapes philippinarum y R. decussatus) recogidas entre mayo y julio de 2020 en dos bancos naturales ubicados en dos pequeños estuarios gallegos, clasificados como zonas de clase C (normativa UE).
El ARN viral se detectó mediante RT-qPCR en nueve muestras de almeja y en tres muestras de sedimento. Sólo cuatro de las nueve muestras fueron positivas para dos regiones diana y las señales de ARN desaparecieron en el ensayo de viabilidad. Se considera que esta es la primera detección de ARN del SARS-CoV-2 en un organismo marino y demuestra que los viriones del SARS-CoV-2 o, al menos, su ARN, pueden alcanzar las aguas costeras.
Los autores de este estudio proponen en sus conclusiones ahondar más en el estudio de su posible persistencia en los sistemas acuáticos, y en el uso de organismos marinos como los moluscos como centinelas de contaminación fecal humana en ambientes costeros.
El pasado 15 de abril tuvo lugar la última reunión de la Junta Directiva de Asomega, celebrada en formato híbrido presencial-online, cuyo punto principal del orden del día era la elección del ganador del XXII Premio Nóvoa Santos. Pero hubo otros asuntos relevantes que se pusieron sobre la mesa. Todo lo relacionado con el plan Impulso Vinteún ocupó la primera -y más extensa- parte de la exposición del presidente.
Julio Ancochea destacó que tanto la Universidad de Santiago como el Parlamento gallego habían aceptado la oferta de integrarse en el Consello Protector de Asomega. Otras relevantes entidades han mostrado su apoyo aunque por cuestiones de procedimiento o de estatutos no pueden sumarse institucionalmente a la iniciativa.
En cuanto a la figura de los benefactores, destacó la plena incorporación con este estatus de PSN, Rochey Bial, así como el compromiso de Boehringer, Menarini, Chiesi, Novartis, Luzán5 y GSK. "Asomega despierta ilusión y ahora tiene un peso mediático pero también político-sanitario que es digno de resaltar. Si se implican es porque creen en nosotros", aseveró Ancochea.
Academia Asomega
A continuación el presidente expuso el proyecto estratégico Academia Asomega, "un Consello de Excelencia de Asomega con personas de reconocido prestigio que nos asesorarán en nuestros objetivos y trayectoria científica, nos ayudarán a entrar en el mundo académico gallego y serán embajadores ante instituciones político-sanitarias y hasta empresariales de Galicia", explicó. Recordó la implicación de Rafael López como cabeza visible del proyecto y adelantó ante la Junta Directiva los nombres de sus primeros integrantes, a los que en breve plazo se comunicará oficialmente su papel en la entidad.
Ramón Mel, impulsor del proyecto, explicó que estas personalidades representarán a diferentes especialidades médicas, así como al ámbito de la gestión sanitaria, al mundo académico y al empresarial. Será un grupo formado en total por ocho personas.
Asomega Nova
Ancochea adelantó también a la Junta Directiva la inmediata puesta en marcha de un ciclo de webinars de Asomega Nova. La primera tendrá lugar el 31 de mayo y versará sobre "La carrera de investigador en España". Protagonizarán este evento Francisco García Río, jefe de Sección de Neumología de La Paz y presidente electo de Separ, y la investigadora Laura Torrado, moderados por el coordinador de Asomega Nova, Felipe Couñago. Señaló también que Asomega Muller prepara una iniciativa similar.
Por otra parte, anunció para el 6 de mayo la próxima reunión de la Junta Directiva en la que se decidirá el ganador de la primera Beca de Medicina Rural Asomega-SEMG.
Segundo Encontro Mundial de Médicos Galegos
El presidente afirmó, alentado por el apoyo recibido por parte de los benefactores, que "parece que hay entidades que confían en nosotros y podemos tener la capacidad, cuando las circunstancias lo permitan, de replicar algo que todos llevamos en la memoria y en el corazón, que fue la primera edición del Encontro".
Recuerda que "fue un reto, un hito y un motivo de posicionamiento de Asomega. 2022 será Año Santo, así que por qué no manejar la idea de la primavera de 2022 para volver a reunirnos en Santiago". Ancochea, en este sentido, fue tajante: "En absoluto renunciamos a este objetivo".
Premio "A fonte limpa"
También se refirió a que el acuerdo con PSN prevé la convocatoria de un premio a la humanización de la sanidad que llevará el nombre de "A fonte limpa". Como recordó el presidente de honor, Aniceto Charro, este era el nombre con que se conocía a "los médicos de Santiago de hace un siglo que, como eran tan buenos, el pueblo los denominaba de esta forma". Charro aceptó la propuesta de Julio Ancochea para presidir el comité que se cree en su momento para este premio.
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