"Las enfermedades infecciosas en la Ruta Jacobea a lo largo de la historia" es el título de la ponencia pronunciada por José María Eiros, vicepresidente de Asomega, en el reciente congreso nacional de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica celebrado en Santiago.
Su planteamiento es que, ya en la Edad Media, las condiciones sanitarias a las que se enfrentaban para combatir determinadas enfermedades infecciosas quienes se ponían en ruta eran muy parecidas a las que se convirtieron en costumbre para nosotros durante la pandemia por coronavirus.
Según recoge El Correo Gallego, con este trabajo tanto su equipo como él pretenden “crear un estado de opinión, generar difusión sobre este aspecto a través de las asociaciones culturales, en foros profesionales interdisciplinares como el nuestro, de forma que surjan personas que puedan dedicarse parcial o íntegramente a analizarlo”, explica.
De todo ello habló también en la conferencia inaugural del II Encontro Mundial de Médicos Galegos de Asomega celebrado en Santiago.
En aquella cita ya explicó que el Camino se presentaba como "un gran cauce para difundir patologías que importan novedades tanto higiénicas en el ámbito de la salud pública como sanitarias en el ámbito de los cuidados y es un punto de intercambio y convivencia de culturas".
La enfermedad, siendo un motivo para peregrinar, era también "un motivo para contagiarse, y en este sentido el camino y el viaje posibilita la transmisión de enfermedades infecciosas, importar patología que no se conocía y, en consecuencia, motivar cuidados y vigilancia con una dimensión individual y comunitaria".
Por eso, el profesor Eiros anima a los investigadores a ahondar en estas líneas de estudio. En concreto, en estudios retrospectivos aplicando las técnicas de amplificación genómica al estudio de cadáveres "y poder documentar la epidemiología de las grandes plagas", lo que se denomina paleomicrobiología, que nos permitirá entender cómo entraron las anteriores pandemias en nuestra sociedad
Por otro lado, haciendo estudios prospectivos que faciliten la protocolización de la asistencia. En este sentido, destaca la importancia de la participación de virólogos españoles en el Reglamento Sanitario Internacional, donde no están presentes a pesar de que "la ruta Xacobea es una de las esenciales en el mundo para poder definir un reglamento sanitario al uso".