España lidera una innovación clínica que podría transformar el tratamiento del cáncer de próstata, poniendo el foco en la calidad de vida del paciente sin perder eficacia oncológica. El ensayo URONCOR 06-24, promovido por la Sociedad Española de Oncología Radioterápica (SEOR) y coordinado en 17 hospitales españoles, estudia si seis meses de terapia hormonal combinada con radioterapia de rescate puede igualar en resultados al estándar de dos años, pero con “muchos menos efectos adversos”, tal como destaca el miembro de la Junta Directiva de Asomega Felipe Couñago, investigador principal del estudio y director médico de GenesisCare España.

“La hipótesis que persigue el ensayo es ofrecer a los pacientes un manejo más eficaz, más corto y con un impacto mucho menor sobre su energía, metabolismo, función sexual y bienestar global”, apunta. El especialista subraya la necesidad de revisar la duración de la terapia hormonal tras la prostatectomía: “Los tratamientos prolongados —de 18 a 24 meses— se asocian a alteraciones metabólicas, pérdida de masa muscular y ósea, fatiga crónica, disfunción sexual y un posible aumento del riesgo cardiovascular. Era necesario estudiar si un enfoque más corto y mejor tolerado podía ofrecer un beneficio similar en los perfiles de pacientes adecuados”, afirma.
La relevancia de este ensayo se confirma en los primeros datos: ya se han reclutado más de 240 pacientes y “los que han recibido la pauta de seis meses muestran una tolerancia excelente, sin toxicidades graves inesperadas y con un control adecuado de la enfermedad en los primeros análisis. Son datos muy prometedores, pero aún preliminares, por lo que habrá que esperar al cierre del ensayo para extraer conclusiones definitivas”, explica el director médico de GenesisCare.
Coordinar un ensayo multicéntrico de esta dimensión, con 17 hospitales implicados, es prueba del nivel científico nacional. Couñago lo define como “reflejo de la madurez investigadora de España en oncología radioterápica. Contamos con un grupo muy comprometido, con estructuras de investigación consolidadas y el apoyo de una CRO independiente que garantiza la calidad metodológica. Este trabajo en red demuestra nuestra capacidad para liderar estudios con impacto internacional”.
El respaldo competitivo también marca la diferencia: “El proyecto ha recibido un fuerte apoyo competitivo, incluyendo tres becas IRAD-SEOR, lo que subraya el interés de la comunidad científica. Si los resultados confirman la hipótesis, podrían modificarse las guías clínicas internacionales y transformar el tratamiento de la recaída bioquímica del cáncer de próstata, evitando tratamientos más largos y con más efectos adversos en muchos pacientes”, añade el especialista.
En el contexto del mes Movember, dedicado a la salud masculina, Couñago enfatiza el valor de investigar para mejorar no solo la supervivencia, sino la vida de los pacientes: “Ensayos como URONCOR 06-24 buscan que los hombres no solo vivan más, sino que vivan mejor, trasladando los avances científicos a la práctica diaria y a la calidad de vida real de los pacientes”.